Jacqueline Barrios, testigo del crimen de las Muchachas de abril, conversó este jueves con Subrayado en la previa al acto reparatorio del Estado uruguayo por los crímenes de las tres chicas en 1974 y la desaparición de Luis Eduardo González y Oscar Tassino. Es un mandato de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. 3s3169
Familiar de “Muchachas de abril” relató lo ocurrido el día de los crímenes 193y62
Este jueves se realizó el acto reparatorio del Estado uruguayo en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo. 406t4u
El acto de reconocimiento de responsabilidad del Estado en el homicidio de Diana Maidanik, Silvia Reyes y Laura Raggio, durante la dictadura, fue encabezado por la vicepresidenta de la República y presidenta de la Asamblea General y el Senado, Beatríz Argimón.
Jacqueline contó que su hermano Washington estaba muy presente y que siempre se preocupaba por ella, era un "hermano-papá". Silvia era muy buena y hacían una linda pareja porque eran compatibles.
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Washington trabajaba en una agencia marítima y allí conoció a Silvia cuando fue a comprar un pasaje. "Él quedó ya impactadisimo con Silvia", relató. Se casaron el 3 de octubre de 1973. Washington militaba en el Movimiento 26 de Marzo y ella lo acompañaba. Silvia había realizado militancia estudiantil.
El día del asesinato, Washington viajó a Buenos Aires y se despidió de Silvia en la mañana quien pasó la tarde en su casa. "La última vez que la vimos fue 23.30", contó Jacqueline, cuando fue a ver a su madre. La cuñada de Silvia recordó que en horas de la madrugada se despertaron con golpes en la puerta y gritos, "se sentían así como disparos", dijo. Y añadió: "Mi padre abrió y era una nube de militares y preguntaban dónde está Washington Barrios". El papá de Washington abrió la puerta y luego de preguntarle el nombre lo tironearon, pero otros militares dijeron que el hombre no tenía nada que ver, ya que buscaban a alguien con ese mismo nombre; ese era su hijo. "A ese no lo maten porque es el padre", recordó.
Los efectivos preguntaron por él y su mamá respondió que se encontraba en Buenos Aires, pero les dijo que estaba su nuera que estaba embarazada, "que tuvieran mucho cuidado con lo que iban a hacer porque ya se veía que la cosa venía complicada", relató. Seguidamente, fueron conducidos a su habitación y dos soldados los apuntaban con un arma. "Cerraron la puerta y se fueron y empezó el tiroteo (...) en el medio se sintieron gritos", relató. Y añadió: "Cuando mi padre vuelve le dice a mi madre, pero yo lo escuché porque estaba sentada al lado de ella, vi que sacaban tres cuerpos. Y bueno, estuvieron toda la noche en casa interrogando a mi padre, a mi madre, a mi también me interrogaron. Fue duro, difícil".
Jacqueline recordó que a partir de ese momento, comenzaron los patrullajes. El día 20 de octubre, el teniente coronel, José Gavazzo fue a su casa con una nota de Washington que decía "viejitos en poco tiempo nos vamos a ver". Ella, en ese momento, intuyó que no lo volvería a ver y así fue. "Eso no lo superas nunca", concluyó.
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