Mercado del Puerto celebra sus 150 años con tres días de festejos 5of1x

Permanece ubicado en las calles Piedras, Pérez Castellano y la Rambla 25 de agosto, antiguamente la zona era llamada “baño de los padres”.

En su inicio el local tenía una fuente de hierro de forma circular, con un chorro en el medio y bancos a su alrededor. Permaneció allí casi 30 años.

Ese mismo año se inauguró un reloj que aun funciona, luego de varias reparaciones requeridas.

Con el paso de los años su fachada ha tenido modificaciones pero se conservan algunas características de sus inicios.

Subrayado recorrió el Mercado del Puerto para descubrir parte de la historia que convive con la actualidad turística.

Darwin Bruzzoni, un músico apodado “El Zurdo”, canta a diario en el mercado y su vida gira en torno al lugar.

Entró por primera vez por la calle Piedras hace 37 años. En sus inicios cantaba en los alrededores, hasta que logró ser conocido en el lugar.

“El Zurdo” describe al mercado del puerto como un mundo y su segunda casa.

Entre canto y canto, le dedicó una canción al centro gastronómico, cuenta que anotaba todos los detalles que veía en una carpeta y la llevaba a todos lados. Un día se puso a escribir y tituló la canción “Al Mercado del Puerto”.

Otro de los personajes que se puede ver a diario trabajando en el mercado es Mario Berniche, se dedica a lustrar zapatos, manteniendo un oficio en extinción desde hace 20 años en este lugar.

Cuenta que aprendió mirando como otros lustraban en la calle, y con un poco de vergüenza un amigo le compró un cajón para comenzar, así se soltó en el oficio.

Mario dice que lo conocen del mundo entero por la cantidad de turistas que le piden el servicio.

En todos los años que lleva en el mercado, ha visto de todo, la transformación, un incendio en 1986 y la llegada de clientes a diario que le cuentan que es un lugar de excelencia.

Con 70 años, trabaja 9 horas por día y espera poder enseñar su oficio, que permanece vigente gracias a los turistas.

Detrás de toda la historia que carga el mercado, en la actualidad involucra a decenas de personas que llegan diariamente a trabajar en él

Pablo Ferreira es un parrillero que lleva 15 años cocinado para los turistas y cuenta que el mercado hoy en día está en su máxima exposición, todos los locales están ocupados y hay una gran oferta, no solo de parrilla, sino que también se suma artesanías, conservas y vestimenta. Ferreira afirma que el contexto del mercado ha cambiado, bordeados por una peatonal que no existía y en un eje con el centro, eso le ha dado una fisonomía nueva.

Personalmente dice que lo que él ofrece hay que hacerlo con amor y respeto, porque está sirviendo comida, y comen niños, ancianos, amigos y familia.

Otro de los parrilleros conocidos del Mercado del Puerto es Luis García, hace 25 años que cocina carnes y está en o con turistas. Cuenta que la gente se sorprende por la forma que cocinan los uruguayos, y por la carne nacional pero el asegura que no tiene nada de misterio. Está desde las 10 a las 18 horas al lado del fuego para cubrir la demanda diaria.

Para García el mercado se mantiene en su tradicionalidad pero se procura en no fallar en que la carne esté acorde al servicio.

Internacionalmente el lugar es un punto central para los turistas que llegan a Montevideo, un punto atractivo a la hora de elegir diversidad de gastronomía y mezcla de cultura.

Turistas chilenos conversaron con Subrayado, llegaron por recomendación de familiares y dicen que el mercado es una parada obligatoria y pintoresca.

Mientras tanto, una pareja de brasileños llegó por segunda vez y que luego de comer variada carne, esta vez eligieron pescado.

Los próximos 14, 15 y 16 de diciembre y con motivo de los 150 años del Mercado del Puerto habrá festejos con desfile de carruajes y trajes de época, exposiciones, música y propuestas culturales.