Lázaro Báez confirma ser el testaferro de Kirchner: el dinero era "de una persona que está arriba" 5v5d4a

“Yo, todo lo que tuve es de una sola persona que está arriba. Y me lo dio para que lo istre y no lo supe istrar quizás en la forma adecuada que él quiso que lo istrara”, dijo el empresario a su abogada.

Báez está preso desde 2016 por lavado de dinero y está acusado por participar de una asociación para delinquir a partir de adjudicación y sobreprecios en la obra pública.

Su declaración podría resultar fundamental en el juicio oral que tiene como centro a la expresidenta Cristina Kirchner.

Hasta el momento Báez se había mantenido en silencio, preso en la cárcel de Ezeiza.

En la grabación se escucha al empresario en un momento de autocrítica: “Quizás por eso estoy donde estoy, para tener un acto de reflexión. Y veremos si Él me da una oportunidad distinta para no cometer los mismos errores”, expresó.

Los hechos protagonizados por Báez están en múltiples causas, entre ellas los llamados "Cuadernos de la Corrupción".

Las intervenciones telefónicas forman parte en un expediente que investiga el rol del falso abogado y agenda de la DEA Marcelo D’Alessio y sus vinculaciones el posible “armado” de la denuncia en contra del fiscal, Carlos Stornelli.

Báez, de 67 años, nació en Corrientes pero se radicó en su juventud en el sur argentino.

Conoció a los Kirchner en 1991. Néstor era alcalde de Río Gallegos y se proponía dar el salto a la gobernación de Santa Cruz.

Se hicieron amigos por una circunstancia fortuita: Lázaro era funcionario bancario y solía atenderlo.

En 2003 creó la constructora Austral que prácticamente monopolizó las obras públicas durante los gobiernos de Néstor y Cristina. Se cree que Báez amasó una fortuna de más de 3.000 millones de dólares.